Así es, el vector que transmite este parásito no es nada más ni nada menos que el mosquito, y estamos hablando del protista Leishmania quien provoca la enfermedad de Leishmaniasis presente entre roedores, marsupiales, primates y aproximadamente 12 millones de humanos alrededor del mundo.
Estos parásitos tienen dos formas:
-Promastigote: De forma alargada, con un flagelo, presente en el intestino del hospedador.
-Amastigote: Esférica con un flagelo, se ubica intracelularmente dentro del hospedador.
Presenta un ciclo de vida con un hospedador intermediario, el mosquito quien succiona la sangre del ser humano o del organismo y al inyectar su aparato bucal introduce promastigotes en la piel donde son fagocitados al interior el organismo. Allí, se transforman en amastigotes y estos logran multiplicarse, de esta manera cuando otro mosquito hembra succiona la sangre ingiere el parásito. Dentro del vector se desarrollan en promastigotes en el intestino medio del insecto y así comienza un nuevo ciclo.
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